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PARA LA REFLEXIÓN

Poco tiempo después de la derrota del Sandinismo en Nicaragua, donde ganó la candidata de la CIA Violeta Chamorro, vino a Vzla el comandante Tomás Borges y estando en Caracas, dictó una charla en la UCV.

En esa ocasión, le hicieron una pregunta:

¿Por qué el Sandinismo fue derrotado?

Borges respondió : porque perdimos la humildad. La pérdida de la humildad arrastra dos vicios, la ostentación y la soberbia. Estos pecados hacen mucho daño a una revolución. La ostentación trae el mal ejemplo, la desconfianza, el derroche (carros de lujo, las prendas, las ropas de marcas, el reloj de lujo, casas suntuosas), todo eso son malas compañeras para la revolución.

La soberbia vuelve ciegos y sordos a los dirigentes, a los gobernantes, a cualquier nivel, no atienden al pueblo, a las masas, de ellos se separan. Pero lo peor es que nubla la mente. Impide el entendimiento, cultiva la vanidad, se creen sabios, y lo más grave, pronuncian discursos para engañar al pueblo, hacen ver que ser rico es malo, pero todos los ven, a esos dirigentes, gozando del poder, burlándose de quienes creyeron en ellos.

Profesor: Javier Lobo.